Cómo cazar el gamo en la ronca

Si has llegado hasta aquí es porque muy posiblemente te estés preguntando cómo cazar el gamo en la ronca. La ronca es la época del año en la que los gamos entran en celo, momento en el cual los gamos machos intentan atraer y cortejar a las hembras. A diferencia de lo que ocurre con el venado, el sonido que emiten los gamos no es un bramido.

 

Destaca por ser un sonido corto, gutural y bastante grave. Podría compararse al sonido de un ronquido. La ronca suele comenzar a finales del mes de septiembre y alargarse todo el mes de octubre. Debe tenerse en cuenta que el periodo podría llegar a variar ligeramente en función de la latitud en la que te encuentres. Es decir, la ronca suele iniciarse antes en las zonas del sur.

 

La época de celo de los gamos se caracteriza por ser una época en la que estos animales se vuelven más descuidados, ya que su único objetivo es transmitir sus genes a las hembras con las que se aparean. Tanto es así que incluso en ocasiones se olvidar de comer.

 

Consejos para cazar el gamo durante la época de celo

Lo más conveniente es decantarse por cazar a primera hora de la mañana o bien con la llegada del atardecer. Estos momentos del día son los idóneos para encontrarles en lugares desarbolados. Y es que por el día suelen intentar buscar refugio, de modo que resultará mucho más complicado que puedas dar con alguno de ellos.

 

En estos momentos se encuentran con la guardia mucho más baja y no estarán tan pendientes de aquello que les rodea. En las horas centrales del día posiblemente puedas verlos ocultos entre plantas y árboles, reposando bajo la sombra, pero siempre en un estado de alerta. A la menor sospecha de peligro, no dudarán en huir rápidamente.

 

Se recomienda que sigas sus ronquidos o los sonidos que emiten para localizarlos con mayor facilidad. La mejor manera de diferenciar ejemplares más jóvenes de aquellos más mayores es por su tono de voz, el cual será mucho más grave en estos últimos. Por norma general, en esta época del año, los machos suelen estar cerca de las hembras, ya que comienzan a crear una especie de harenes de hembras con las que aparearse.

 

Si lo que deseas es poder hacerte con un buen trofeo, lo más adecuado es intentar cazarlos al inicio de la temporada. Si esperas más tiempo a cazarlos es muy posible que sus palas estén ya rotas, fracturadas o desgastadas debido a las peleas o luchas que han tenido con otros gamos machos.

 

En el supuesto de que lo que busques es cazar un ejemplar de avanzada edad, has de saber que podrás encontrarlos algo más alejados del “bullicio”. Es decir, suelen encontrarse en lugares que estén algo menos concurridos, lugares más tranquilos y relajados. Son muy proclives a descansar en suaves colinas que posean un abundante arbolado, pero siempre junto a áreas abiertas.

 

La cola de los gamos es un estupendo elemento comunicativo. A través de su cola son capaces de transmitir numerosos mensajes. Cuando su cola se mueve suavemente en horizontal de un lado a otro significa que están tranquilos. Sin embargo, cuando detectan un peligro inminente suelen mostrar la cola en vertical e inactiva, realizando movimientos muy rápidos y pausados.

 

Destacar que aunque podrás encontrar gamos en prácticamente toda la península, los mejores cazaderos los podrás encontrar en Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura, Madrid, así como en las provincias más meridionales de Castilla y León.

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